El equinoccio de otoño al suspirar detrás del verano ,dejaba arenosas trizas de mercurio retrógrado que salpicaban el camino de vuelta a casa.Un cielo plomizo de espesos nubarrones anunciaba una extendida noche .A mitad de su pesarosa ruta , una mujer maleta en mano y de muy excéntrico porte, le pidió risueña que le tomara una foto.Le dijo al hombre de aspecto taciturno,que iba demorada camino a la estación.El tristón individuo accedió cordial,pero al disparar el botón de la cámara un plateado y prolongado flash le centelleó los ojos.Segundos después, al abrirlos , la dama de inusual vestir se había esfumado entre la argentada luz.Al mirar la instantánea foto que sostenía en sus dedos,aquel hombre que minutos atrás se lamentaba por la llegada del mustio otoño, pudo ver en aquel retrato flotando sobre un parque un colorado florecimiento de exóticos capullos que le avivó el desganado espiritu .Supo que ese ultimo recuerdo ,era la mismisima primavera quien se lo había puesto en sus manos...
jueves, 15 de octubre de 2009
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Me encantaria poder hacer eso con mi camara. Bellisimo.
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